Las mujeres con hiperplasia atípica corren más riesgo de cáncer de mama de lo que antes se pensaba, La hiperplasia atípica de la mama es una afección precancerosa, descubierta en 10 por ciento de las más de un millón de biopsias de mama con resultados benignos que anualmente se realizan en Estados Unidos. En el examen microscópico, la atipia muestra células mamarias que empiezan a crecer descontroladamente (hiperplasia) y se agrupan en patrones anómalos (atipia). Las lesiones atípicas se consideran benignas, pero debido a su riesgo, aparición y cambios genéticos, muestran algunas de las primeras características del cáncer.
Los datos de cientos de mujeres con este tipo de lesiones indican que el riesgo absoluto de ellas para desarrollar cáncer de mama aumenta en más de 1 por ciento al año. El estudio descubrió que después de 5 años, el 7 por ciento de estas mujeres desarrolló cáncer; después de 10 años, la cantidad aumentó al 13 por ciento; y después de 25 años, 30 por ciento de ellas tuvo cáncer de mama.
Los resultados colocan a más de cien mil mujeres diagnosticadas anualmente con hiperplasia atípica, también conocida como atipia, dentro de una categoría de alto riesgo, en la que sería muy provechoso realizar detecciones intensas y utilizar medicamentos para reducir el riesgo.
“Predecir mejor el riesgo para este grupo permite personalizar la atención clínica al nivel de riesgo de cada mujer”, comenta la Dra. Lynn Hartmann, oncóloga de la Mayo Clinic y autora principal del estudio. “Es necesario hacer más para esta población de mujeres que corre mayor riesgo, tal como ofrecerles la opción de detecciones mediante resonancia magnética, además de las mamografías, y recomendarles las terapias anti-estrógeno que pueden reducir el riesgo de desarrollar cáncer”.
Las investigaciones anteriores revelaron que las mujeres con atipia tiene un “riesgo relativo” cuádruple o quíntuple, lo que significa que corren un riesgo cuatro o cinco veces mayor de desarrollar cáncer de mama que las mujeres que no presentan esas lesiones. No obstante, pocos estudios han contado con la cantidad de pacientes y el tiempo de seguimiento para informar sobre el “riesgo absoluto” de la mujer, o probabilidad de desarrollar cáncer de mama en un período determinado de tiempo.
A fin de definir claramente ese riesgo, el equipo de la Mayo Clinic siguió a 698 mujeres con atipia, cuyas biopsias se realizaron en la Mayo Clinic entre 1967 y 2001. El equipo revisó los resultados de patología y los expedientes médicos, además de recurrir a cuestionarios para seguimiento de las pacientes a fin de determinar cuáles mujeres desarrollaron cáncer de mama y cuándo lo hicieron. La investigación descubrió que después de un seguimiento promedio de 12,5 años, 143 mujeres desarrollaron la enfermedad.
Es importante mencionar que los resultados de la Mayo fueron validados por científicos de la Universidad Vanderbilt, a través de biopsias de otra cohorte independiente de mujeres con atipia. Ambos conjuntos de datos revelaron que 25 años después de la biopsia, el 25 al 30 por ciento de esas mujeres desarrolló cáncer de mama.
El equipo de la Mayo demostró anteriormente que dos modelos estadísticos comunes para predicción del riesgo (el modelo BCRAT, o medio de evaluación del riesgo para cáncer de mama; y el modelo IBIS, o estudio internacional de intervención sobre el cáncer de mama) no eran buenos para las mujeres con hiperplasia atípica, lo que destacaba la necesidad de ofrecer métodos alternos para predicción del riesgo a esa población.
“En lugar de confiar en un modelo estadístico, nuestro estudio ofrece datos reales sobre el cáncer de mama descubiertos en una población de mujeres con atipia. Estos datos sobre el riesgo absoluto son preferibles a un modelo hipotético”, explica la Dra. Amy Degnim, coautora principal del estudio y cirujana de mama en la Mayo Clinic.
Al incorporar la información de la muestra patológica de la paciente, los científicos pudieron brindar un cálculo todavía más exacto del riesgo porque descubrieron que según aumenta la extensión de la atipia en la biopsia (medido a través de la cantidad de lesiones atípicas independientes, o focos), igualmente aumenta el riesgo de la mujer de desarrollar cáncer de mama. Por ejemplo, 25 años después de la biopsia, el 47 por ciento de las mujeres que tenía tres o más focos de atipia en la biopsia desarrolló cáncer de mama, comparado frente a apenas el 24 por ciento de las mujeres con un solo foco.
En base a estos resultados, el equipo de investigación recomienda que se reconozca que las mujeres con hiperplasia atípica corren durante toda su vida un riesgo significativamente mayor de desarrollar cáncer de mama y, por ello, califican para detecciones mediante resonancia magnética. Por otra parte, en ensayos clínicos realizados en mujeres con atipia ya se ha comprobado que los medicamentos anti-estrógeno, como el tamoxifeno, reducen el riesgo de cáncer de mama en 50 por ciento o más; aunque, según la Dra. Degnim, muchas mujeres con atipia todavía no toman medicamentos debido, en parte, a que ni ellas ni sus médicos tenían cálculos contundentes sobre el riesgo de cáncer de mama para guiarse.